El presidente de EE.UU., Donald Trump, firmó el pasado jueves 25 de septiembre un memorando presidencial para restablecer la pena de muerte en Washington, mientras que la secretaria de Justicia, Pam Bondi, anunció que el Departamento de Justicia también buscará la pena de muerte en todo el país, según afirma la cadena CNN.
“La pena de muerte en Washington”, dijo Trump a periodistas en la Oficina Oval. “Si matas a alguien, o si matas a un agente de policía, pena de muerte. Y, con suerte, eso no ocurrirá”.
“Es una pena capital muy interesante, ciudad capital. Capital, capital, capital”, añadió.
El memorando instruye específicamente a Bondi y a la fiscal federal del Distrito de Columbia, Jeanine Pirro, “a implementar plenamente la pena de muerte aquí en Washington, cuando las pruebas y los hechos del caso indiquen que debe aplicarse”, explicó Will Scharf, secretario de la Casa Blanca.
Bondi, quien estuvo junto a Trump en la Oficina Oval, anunció: “No solo la estamos buscando en Washington, sino en todo el país, nuevamente”.
Washington abolió la pena de muerte en 1913 , pero la restableció en 1919. El estatuto se mantuvo sin cambios hasta 1975 , cuando fue abolido de nuevo.
Una Iniciativa al Pueblo de ese mismo año, la Iniciativa 316 , la restableció por segunda vez como pena obligatoria para el asesinato agravado en primer grado. Los fallos de la Corte Suprema de Estados Unidos en los casos Woodson contra Carolina del Norte y Roberts contra Luisiana invalidaron las leyes que preveían la pena de muerte, y el estatuto se modificó para detallar los procedimientos para su imposición.
Esta nueva ley fue declarada inconstitucional por la Corte Suprema de Washington, ya que una persona que se declarara inocente podía ser condenada a muerte, mientras que quien se declarara culpable recibiría una pena máxima de cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
La ley vigente se aprobó en 1981 para corregir estas deficiencias constitucionales.
En otro orden de cosas, la secretaria de Justicia también agregó en la misma conferencia junto al Presidente que el Departamento de Justicia está en proceso de «trasladar a reclusos que fueron retirados del corredor de la muerte por el expresidente Joe Biden a instalaciones de máxima seguridad».
“Los trasladaremos a prisiones de máxima seguridad, donde serán tratados como si estuvieran en el corredor de la muerte por el resto de sus vidas”, dijo Bondi.
El memorando presidencial y los comentarios de Bondi se producen después de que Trump dijera el mes pasado que buscaría la pena de muerte en la capital del país, calificando la pena capital como una “medida preventiva muy fuerte”. En ese momento, señaló que los estados “tendrán que tomar su propia decisión”.
Tradicionalmente, cuenta CNN, la Corte Superior de Washington maneja la mayoría de los casos de homicidio en la ciudad y está sujeta al código local, que no autoriza la pena de muerte.
No obstante, la oficina de la fiscal federal en Washington, que procesa delitos tanto en la corte local como en la federal —a diferencia de cualquier otra jurisdicción en el país— podría presentar cargos federales en muchos casos elegibles para la pena de muerte y solicitar su aplicación.
Redacción






